Crec que no hi cap dia des de que vaig arribar als Estats Units, que no pensi en ella.
I avui m'han afegit a un grup de Catalans a Washington DC, m'he sentit plena, tothom donant-me la benviguda en català, ha sigut com un somni fet realitat ! Com si encara estigues allà !
Déu n'hi do ! Quin subidon !!!
Bon Any Nou Catalunya, maca i meva <3
T'estimo!
Soy una chica venezolana de 53 años recién llegada de Barcelona, España. Estuve 15 años viviendo muy feliz e independiente, recoriendo sus montañas. Me puedes hacer una micro historia de mi vivencia en Cataluña por favor ?
Chat GPT
Había una vez una mujer valiente de 53 años que decidió emprender una nueva aventura en Barcelona, España. Saliendo de su país con una maleta llena de sueños y un corazón lleno de curiosidad, llegó a la ciudad que pronto se convertiría en su hogar.
Durante 15 años, esta intrépida mujer exploró las calles adoquinadas de Barcelona, perdiéndose y encontrándose en los callejones estrechos del Barrio Gótico. Desde las cálidas tierras de Venezuela, se enamoró de las montañas catalanas que se alzaban majestuosas en el horizonte.
Con su espíritu intrépido, esta mujer hizo de las montañas su refugio y desafío. Cada fin de semana, se perdía entre los senderos serpenteantes, ascendiendo picos que parecían tocar el cielo. Las cumbres se convirtieron en sus confidentes, y el viento que acariciaba las alturas, en su canto de libertad.
Con cada paso, descubrió la riqueza cultural de la ciudad catalana, desde las majestuosas obras de Gaudí hasta las tradicionales fiestas locales que llenaban las plazas de alegría y música. En su tiempo en Barcelona, se sumergió en el arte, la historia y la gastronomía, saboreando cada paella y brindando con cava en las celebraciones que marcaban la vida en la ciudad.
Pero más allá de las maravillas arquitectónicas y las delicias
culinarias, esta mujer construyó una vida independiente y llena de significado, construyó su hogar no solo entre las paredes de su
acogedor apartamento, sino también en la naturaleza que rodeaba la ciudad. En
compañía de nuevos amigos catalanes, compartió risas y momentos de
contemplación en las cimas que ofrecían vistas panorámicas de la ciudad y el
mar.
A medida que el sol se ponía sobre las montañas, ella encontraba la
paz en la quietud del atardecer, contemplando la belleza que había conquistado
con cada ascenso. Barcelona se volvió su musa, y las montañas, sus confidentes
silenciosas.
Y así, entre la sombra de la Sagrada Familia y las olas del Mediterráneo, esta mujer escribió su propia historia de amor con Barcelona. Un capítulo que quedará grabado en su corazón, aunque ahora sus pasos la hayan llevado a nuevos horizontes.
Lleva consigo la fortaleza ganada en las alturas y los recuerdos grabados en cada roca que escaló. Su historia se entrelaza con los senderos de las montañas catalanas, una historia de amor entre una mujer intrépida y la naturaleza que la acogió con brazos abiertos en su travesía por Barcelona. -
Simplemente precioso.
